miércoles, 25 de mayo de 2016

Bruxismo y Osteopatía

¿Te despiertas con cansancio en la musculatura de la boca, cara o cuello y dolor en la región de la mandíbula y los dientes?. Si la respuesta a esta cuestión es afirmativa y, además de estos síntomas, presentas alguno o varios de los siguientes, es probable que padezcas bruxismo:
  • Rechinar de dientes o te han comentado que esto te ocurre cuando duermes  (con su correspondiente ruido característico, “como masticar cubitos de hielo”).
  • Desgaste piezas dentarias.
  • Ruidos y/o dolor en la articulación témporo-mandibular (para nosotros a partir de ahora será la ATM, situada delante del oído).
  • Cefalea o dolor de cabeza.
  • Dolor de oídos o sensación de zumbido en ellos (tinnitus).
  • Restricción y/o limitación el movimiento de apertura de la boca o asimetría en el movimiento de la mandíbula al abrir la boca (en ocasiones puede ser perceptible un chasquido en la ATM).

¿QUÉ ES EL BRUXISMO?

Es el hábito de apretar o rechinar los dientes, con distintos grados de intensidad y generalmente de forma inconsciente, produciéndose esta disfunción de la ATM con mayor frecuencia durante el descanso nocturno.images3
En cuanto a las causas, no existen causas específicas, pero el estrés y la ansiedad contribuyen a incrementar considerablemente su aparición e intensidad. 
CLASIFICACIÓN Y TIPOS DE BRUXISMO
  1. Bruxismo diurno. Se define como el apretamiento o frotamiento de los dientes, a veces inconsciente, pero, generalmente, consciente. Suele estar relacionado con otros tics o manías como comerse las uñas o morderse los labios, y es frecuente que se produzca cuando se está concentrado: trabajando, estudiando e incluso conduciend0.
  2. Bruxismo nocturno. Totalmente involuntario. Se produce mientras se duerme. Puede tener lugar por apretamiento o friccionamiento y puede ser el causante del cansancio muscular o dolor de cabeza que aparece al levantarse de la cama y de la contractura de los músculos del cuello.
  3. Bruxismo céntrico o de apretamiento. Se aprietan los dientes por una contracción muscular. Estos no llegan a desgastarse, pero la mandíbula tiende a cargarse en exceso, provocando contractura muscular asociada a molestia y dolor, especialmente en la musculatura oclusora de la mandíbula.
  4. Bruxismo excéntrico o de frotamiento. Los dientes rechinan produciendo un desgaste dentario mayor, aunque la molestias  muscular apenas es apreciable, debido a la alternancia entre contracción-relajación de los grupos musculares implicados.
  5. Bruxismo diurno y nocturno. Tiene lugar en cualquier momento del día, es el más dañino y el que provoca mayores problemas, presentándose como una lesión cronificada, bruxando la persona constantemente.
¿POR QUÉ SE PRODUCE?  ¿QUÉ LO CAUSA?
Inicialmente se pensó que el bruxismo estaba provocado por problemas odontológicos, como obturaciones mal realizadas, pero se observó que corrigiéndolas no se solucionaba el problema. Posteriormente, se estableció como causa principal la mala oclusión y contactos prematuros entre los dientes al morder, factor que hemos comentado anteriormente, pero se observó que hay una gran cantidad de personas con estas disfunciones que a pesar de ello no bruxan. Actualmente, se piensa que su origen obedece a varios de estos factores junto con un elevado nivel de estrés emocional.
En este sentido, no es nuevo comentar que las situaciones estresantes desencadenan en el individuo una serie de emociones, de intensidad y características diferentes según la personalidad de cada uno. Así, se ha observado que las personas que bruxan suelen presentar mayoritariamente altos niveles de ansiedad, seguido de sentimientos de ira reprimida, miedo, frustración, personalidad demasiado competitiva, etcétera. Asimismo, las molestias que ocasiona el bruxismo, principalmente el dolor, son motivo de alteraciones emocionales y en el estado de ánimo del individuo, asociadas a la disfunción de la ATM y de sus correspondientes “tirantes”, reflejados en el sistema muscular.

¿Puede conseguir la osteopatía  ayudar a alguien que sufre bruxismo y le han mandado una férula de descarga?

Como siempre ,vamos a ver la problemática del bruxismo desde el enfoque osteopático, de esta forma,  cuando alguien nos cuenta de que sufre de bruxismo y que le han mandado una férula de descarga, nos sirve para orientarnos y pensar que esta persona el problema le viene de la musculatura masticadora principalmente y de la articulación temporomandibular (habitualmente se ve representada por las siglas ATM), lo que tenemos que intuir primeramente es que esa persona puede tener ciertas alteraciones estructurales a nivel musculo esquelético en la musculatura del arco cigomático y principalmente a una alteración estructural o limitación de movilidad en la articulación temporomandibular (ATM) mencionada anteriormente.
Como siempre siguiendo las bases de los principios fundamentales de la Osteopatía, lo que vamos a intentar es reequilibrar nuevamente ese desequilibrio estructural que pueda sufrir la persona, para que el cuerpo funcione como un todo, ayudarla con los posibles dolores de cabeza que pueda sufrir y evitar que siga apretando y rechinando los dientes, para que, en la medida de lo posible, no tenga que usar la férula de descarga por ese problema.

¿Cómo sería una sesión con osteopatía para una persona que refiere tener bruxismo?

Como siempre,  os indicamos un “resumen estándar” de cómo podría ser una sesión para una persona con este problema a modo de guía. Como siempre, como hemos comentado en varias ocasiones, la osteopatía trata personas, no trata enfermedades ni lesiones,  y por tanto, aunque una persona puede tener los mismos problemas que otra, siempre hay que hacer un estudio osteopático y tratarla individual y personalmente con los criterios que la osteopatía rige.
o   Primero se realizaran unas pruebas osteopáticas, exploraciones  y ciertos test específicos para la zona de la mandíbula, concretamente la musculatura del arco cigomático y la articulación temporomandibular (ATM),  para detectar las limitaciones de movilidad existentes en sus estructuras y la rigidez de los músculos de esa zona.
o   Una vez realizadas estas pruebas, el osteópata empezará la sesión con el tratamiento general osteopático (TGO) de la zona afectada, en este caso concreto, especialmente la musculatura de la zona del cuello anterior, las inserciones de los músculos en el arco cigomático y la arcada dental inferior, y de la musculatura adyacente, como puede ser la musculatura del temporal, relajando las restricciones encontradas en las pruebas anteriores, seguido de los estiramientos correspondientes para esa musculatura. Con esto se buscará dar elasticidad a los músculos que estén rígidos devolviéndoles su elasticidad correcta.
o   Seguidamente se procederá a la relajación muscular de la zona intra-bucal, especialmente del musculo masetero y pterigoideo.
o   Por último se realizarán las movilización y manipulaciones correspondientes en las alteraciones estructurales existentes, principalmente la articulación temporomandibular,  consiguiendo de esta forma que estas tengan una movilidad adecuada y que por tanto la funcionalidad sea la correcta.
Al existir un movimiento articular correcto de la articulación de la mandíbula, la relajación de todo la musculatura de la masticación y musculatura adyacente, conseguimos ayudar a la persona de su bruxismo y por tanto el uso de la férula de descarga.

Hay algún caso en el que no me pueda ayudar la osteopatía.

Como siempre la osteopatía nos puede ayudar a niveles mecánicos, si existe algún problema infeccioso en el que la persona por ejemplo sufra fiebres o vómitos, un osteópata no puede intervenir.
Como hemos comentado con anterioridad, un osteópata  realiza pruebas, test y preguntas al paciente, si en algún momento el detecta algo por el cual la osteopatía no puedo realizarse, como por ejemplo que el paciente tenga fiebre, este se lo hará saber.